Ubicada en el suroeste del municipio y cerca de la margen izquierda del río Zêzere, la parroquia de Ferro se encuentra a unos once kilómetros de Covilhã. Está formado por los lugares de Freixo, Lameiras, Madeira, Monte Serrano, Penedia, Rasas, Ribeiro do Moinho, Semaria, Sítio do Marujo, Sítio da Póvoa, Sítio do Ribeiro de Linhares y Souto Alto.
Ferro está limitado al norte por parte de la parroquia de Caria, separada de Ferro por el arroyo del mismo nombre, y también por el río Zêzere, que sirve de límite natural entre esta parroquia y Boidobra. Limita al sur con las tierras de Peroviseu, al este limita con las parroquias de Peraboa y Peroviseu, al oeste limita con las parroquias de Tortosendo y Alcaria.
El asentamiento de esta parroquia se remonta a la época romana, ya que fue este pueblo el que dio nombre a la localidad, a través del vocablo latino Ferrum. Es sabido cómo los romanos, en las tierras que conquistaron, aprovecharon los recursos minerales del subsuelo, y también es conocida la riqueza de esta región en esta materia.
En cuanto al patrimonio, una referencia inicial para la Igreja Matriz, de características barrocas, construida en el siglo XVIII, destacando en su interior los altares en talla dorada y el retablo del Sagrario. Los altares existentes están dedicados a Nossa Senhora da Conceição y Nossa Senhora do Rosário.
En cuanto a la ermita de Espírito Santo, conserva la mayor parte de sus elementos originales, ya que fue construida en el siglo XVI y perteneció a la Orden de Santiago.
La ermita del Sagrado Corazón de María, del siglo XIX, está situada a las afueras del pueblo, con una arquitectura sencilla que la hace más bella.
Así, no será de extrañar que el topónimo tenga precisamente que ver con esta realidad de la parroquia.
